De la lesión al penal errado. La noche en la que Dibu salvó a un Messi que estuvo lejos de su plenitudPor Federico Águila
HOUSTON, (enviado especial).- En el estadio la tensión estaba en su punto culmine. Lionel Messi tomó la pelota y caminó hacia el punto penal con la vista fija. Se hizo cargo, como es costumbre, de la responsabilidad del primero. La pinchó, la pelota pegó en el travesaño y quedó flotando un instante antes de caer suavemente sobre la red.